Congelador o no congelador, esa es la cuestión

Así que estás planteándote si comprar un congelador adicional para tu hogar pero no estás totalmente seguro de si de verdad lo necesitas. Y la respuesta a esto, como siempre, depende de cada casa y cada familia. ¿Tu familia es numerosa? ¿Vives lejos del supermercado o la tienda más cercana? ¿Eres asesino en serie? Espera, mejor ignora eso último.

Hoy en Fersay vamos a explicarte los factores más importantes que influyen en si es hora de comprar ese congelador extra para tu hogar, así que si actualmente estás inmerso en ese dilema o crees que pronto lo estarás, ¡sigue leyendo!

¿Familia numerosa?

Si tienes una familia numerosa no hay ninguna duda al respecto, necesitas un congelador extra. ¿Por qué? Porque te permitirá almacenar todo tipo de alimentos congelados durante meses, y eso tiene, a priori, dos consecuencias.

Primero, no tendrás que ir de compras cada dos días para evitar que tus seres queridos se mueran de hambre. Segundo, porque el congelador de tu nevera probablemente no te ofrezca  espacio suficiente para almacenar toda esa carne, pescado, helados, tuppers con todo tipo de comidas ya preparadas, cubitos de hielo y cualquier otro tipo de alimento o bebida que necesites congelar.

¿Vives en una zona alejada de un centro urbano?

A veces no es tan fácil (o tan cómodo) conducir 5, 10 o incluso 20 kilómetros para desplazarte hacia la tienda más cercana sólo para comprar una bolsa de hielo. Si vives en una zona alejada del supermercado o la tienda más cercana, tener que coger el coche varias veces al día para desplazarte hacia ella te costará una sorprendente cantidad de tiempo cada semana.

Con un congelador extra podrás almacenar todo tipo de alimentos y bebidas durante meses, así que si haces las cosas bien y te organizas adecuadamente, con un par de viajes por semana puedes ir olvidándote de tener que levantarte del sofá para coger el coche y conducir durante media hora hacia la tienda más cercana cada dos por tres.

¿No tienes coche o aunque lo tuvieras no podrías usarlo?

Si no tienes un vehículo o por cualquier razón tu movilidad es limitada, bien debido a la edad, a una lesión o a una minusvalía, tener un congelador puede marcar la diferencia entre ser capaz de sobrevivir a tu día a día o no serlo. Obviamente también tienes la posibilidad de molestar a algún amigo o familiar para que vaya a comprar por ti, pero lo malo de depender de alguien para esto es que no siempre podrá estar disponible para atenderte, así que el congelador será tu salvavidas en este tipo de situaciones.

¿Aún indeciso? No te preocupes, un congelador es una inversión que se amortiza sola con los años. Incluso aunque creas que no te hace falta, comprarlo te ofrecerá una serie de comodidades de las que aún no eres consciente pero que te garantizamos que merecen la pena.