Cómo limpiar un lavavajillas que huele mal

Las sobras de la cena se guardan, la encimera se limpia y se pone en marcha el lavavajillas. ¡No hay nada como acostarse sabiendo que tu cocina está limpia! Espera un momento… ¿de dónde viene ese olor? Sí, lo más probable es que venga de tu lavavajillas.

Hoy en Fersay vamos a explicarte cómo limpiar un lavavajillas maloliente no sólo para que tus platos no salgan de él con ese mismo olor, sino también porque a la larga esta situación puede volverse irreversible.

Lo primero, limpiar el filtro de drenaje

La mayoría de lavavajillas tienen un filtro de drenaje, precisamente, para evitar que las partículas de comida obstruyan el drenaje (la causa más común de malos olores en el lavavajillas). Para comprobar si se trata de esto, tienes que:

• Retirar el filtro de drenaje en la parte inferior del lavavajillas
• Lavar el filtro en el fregadero de la cocina con agua caliente y jabón. Usa un cepillo si no llegas a todas las superficies interiores.
• Asegúrate de que el desagüe esté libre de residuos de alimentos y suciedad antes de volver a colocar el filtro de drenaje. Limpia las partículas con una esponja si es necesario.

Lo segundo, limpiar el brazo aspersor

Puede que con el primer consejo se haya solucionado el problema o puede que no, pero nunca está de más continuar con la limpieza de los elementos más importantes de tu lavavajillas para mantenerlo en perfecto estado.

Si el brazo aspersor (también llamado brazo rociador) se obstruye con alimentos, la capacidad del lavavajillas de limpiar platos, tazas y cubiertos disminuye drásticamente y pueden empezar a producirse malos olores. Para evitarlo:

• Retira los brazos aspersores superior e inferior.
• Sostén un brazo aspersor sobre el fregadero y elimina las partículas de comida adheridas con un bastoncillo de algodón.
• Haz correr el agua a través del brazo aspersor para asegurarte de que todos los orificios estén despejados.
• Repite lo mismo con el segundo brazo rociador.

Y por último, limpia el interior

Con el tiempo, la suciedad puede acumularse en las paredes interiores del lavavajillas. Una limpieza rápida puede hacer maravillas para eliminar el mal olor:

• Retira los estantes superior e inferior y lávalos con agua caliente en el fregadero de la cocina.
• Frota el interior del lavavajillas con un trapo o esponja humedecida en agua caliente.
• Limpia las juntas de la puerta (si tienen moho u hongos, mejor reemplázalas).
• Vuelve a colocar los estantes y pon una taza de vinagre blanco en un recipiente sobre la rejilla superior.
• Enciende el lavavajillas y programa el ciclo más caliente disponible.

Si después de hacer todo esto el mal olor persiste, lo mejor es que llames a un técnico o al servicio de atención al cliente del fabricante en caso de que aún esté vigente la garantía. ¡Esperamos haberte ayudado!