Recomendaciones sobre eficiencia energética en electrodomésticos

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eficiencia energética en electrodomésticos

En un mundo donde la sostenibilidad y el ahorro se han convertido en prioridades, elegir electrodomésticos que cuidan tanto tu bolsillo como el planeta es más relevante que nunca. 

En este 2025, la innovación se pone al servicio de la eficiencia energética, ofreciéndonos productos que reducen el consumo sin sacrificar el rendimiento. 

¿Te gustaría conocer cuáles son los electrodomésticos que están marcando tendencia en este ámbito? ¡Sigue leyendo y descubre cómo transformar tu hogar en un espacio más tecnológico y económico!

¿Por qué apostar por la eficiencia energética?

No solo se traduce en una reducción de la factura de la luz, sino que también contribuye a disminuir la huella de carbono de cada hogar. Los nuevos modelos incorporan tecnologías avanzadas, como sistemas inteligentes y sensores que optimizan el consumo según las necesidades reales, lo que se traduce en un funcionamiento más limpio y sostenible.

Electrodomésticos eficientes que lideran el mercado en 2025

Frigoríficos inteligentes con sistema Inverter

Los frigoríficos de última generación incorporan tecnología Inverter y sistemas de enfriamiento dinámicos que ajustan la temperatura de forma automática. La tecnología inverter regula el encendido y apagado del compresor para mantenerlo el menor tiempo posible funcionando y a un voltaje menor, resultando ser mucho más eficiente. 

El enfriamiento dinámico optimiza el consumo en función de la cantidad de alimentos almacenados y las condiciones ambientales, reduciendo considerablemente el gasto energético. 

💡 Recomendación: Los frigoríficos con etiqueta energética A+++ y sensores inteligentes ajustan la temperatura de forma precisa según la cantidad y el tipo de alimentos. 

Lavadoras y secadoras ecoamigables

La tecnología ha revolucionado el lavado de ropa en casa. Las lavadoras más eficientes cuentan con sensores que determinan el nivel de carga y la cantidad de agua necesaria, permitiendo ciclos de lavado adaptados a la carga. 

💡 Recomendación: Opta por lavadoras con tecnología EcoBubble o Aqua Saver, que permiten un mejor rendimiento reduciendo el gasto de agua y energía.

Lavavajillas con bajo consumo de agua y energía

Los lavavajillas modernos han evolucionado para ser más inteligentes y eficientes. Con ciclos rápidos y modos eco, los nuevos lavaplatos ajustan la temperatura y el uso del agua de forma precisa, asegurando que se utilicen únicamente los recursos necesarios sin comprometer la limpieza de vajilla. 

💡 Recomendación: Escoge lavavajillas con sensores de suciedad y programas adaptados a cargas reducidas, garantizando un rendimiento óptimo y minimizando el consumo energético. 

Hornos de convección y microondas de última generación

En el ámbito culinario, los hornos y microondas dan un salto hacia la eficiencia energética. Hornos con tecnología de convección y microondas con sistemas de distribución uniforme de energía, permiten cocinar de manera más rápida y eficiente, aprovechando cada vatio de energía al máximo.

💡 Recomendación: Considera hornos con funciones de autolimpieza y microondas que ajustan la potencia automáticamente según el tipo de alimento, lo que te ayudará a cocinar de manera más económica y precisa.

Placas de inducción

Las placas de inducción se han posicionado como una de las opciones mas eficientes para cocinar. Gracias a su tecnología basada en campos electromagnéticos, calientan directamente el recipiente y reducen significativamente la pérdida de energía, ofreciendo una respuesta rápida y un control de temperatura preciso.

💡 Recomendación: Opta por placas de inducción con control táctil, zonas flexibles y función de apagado automático, para asegurar no solo un uso eficiente de la energía, sino también una mayor seguridad en tu cocina.

Este 2025 se abre la puerta a un estilo de vida más consciente y responsable. Al elegir electrodomésticos eficientes, no solo cuidas el medio ambiente, sino que también optimizas tu consumo energético y disfrutas de la tecnología de vanguardia en cada rincón de tu hogar.

¿Qué electrodoméstico crees que marcará la diferencia en tu casa? ¡Queremos saber tu opinión! Deja tu comentario y comparte tus experiencias o dudas.

Principales causas del deterioro del tambor de tu lavadora

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Suciedad en el tambor de la lavadora. averías y soluciones

El tambor de la lavadora es una pieza fundamental para el correcto funcionamiento de este electrodoméstico. Sin embargo, con el paso del tiempo y el uso continuado, puede sufrir diversos problemas que afectan su conservación. En este artículo, exploraremos las razones más comunes por las que se estropea el tambor de una lavadora y cómo puedes prevenirlo.

1. Sobrecarga de ropa en la lavadora

Una de las causas más frecuentes del deterioro del tambor de la lavadora es la sobrecarga de ropa. Cuando excedemos la capacidad recomendada por el fabricante, el peso extra ejerce una presión excesiva sobre el tambor y sus componentes. Esto puede provocar:

  • Deformaciones en la estructura del tambor
  • Daños en los rodamientos
  • Desgaste prematuro de las juntas

Para evitar este problema, es fundamental respetar siempre la capacidad máxima indicada en el manual de usuario de tu lavadora.

2. Objetos extraños en el tambor

Los objetos olvidados en los bolsillos de la ropa, como monedas, llaves o clips, pueden causar graves daños al tambor. Estos elementos metálicos pueden:

  • Rayar la superficie interior del tambor
  • Provocar abolladuras
  • Dañar las paletas de agitación

Antes de cada lavado, revisa minuciosamente los bolsillos de todas las prendas para evitar introducir objetos extraños en la lavadora.

3. Desgaste natural de los rodamientos

Los rodamientos del tambor de la lavadora son piezas esenciales que permiten el giro suave del tambor. Con el tiempo, estos componentes pueden desgastarse debido a:

  • La fricción constante
  • La acumulación de residuos de detergente
  • La exposición a la humedad

Cuando los rodamientos fallan, el tambor puede vibrar excesivamente o hacer ruidos anormales durante el funcionamiento. Un mantenimiento regular y el uso de jabones y detergentes adecuados, pueden ayudar a prolongar la vida útil de los rodamientos.

4. Corrosión y oxidación

La humedad constante y los residuos de detergente pueden provocar la corrosión del tambor, especialmente si está fabricado con materiales susceptibles a la oxidación. Este problema se agrava cuando:

  • Se utilizan detergentes agresivos
  • No se seca adecuadamente el tambor después de cada uso
  • La lavadora se instala en un ambiente con alta humedad

Para prevenir la corrosión, es recomendable limpiar regularmente el tambor y mantener la puerta de la lavadora abierta entre lavados para permitir la circulación de aire.

5. Desbalance del tambor de la lavadora

Un tambor desbalanceado puede causar vibraciones excesivas y dañar tanto el propio tambor como otros componentes de la lavadora. Las causas más comunes de desbalance son:

  • Distribución desigual de la ropa durante el centrifugado
  • Patas de la lavadora mal ajustadas
  • Desgaste de los amortiguadores

Asegúrate de distribuir uniformemente la ropa en el tambor y verifica que la lavadora esté correctamente nivelada para evitar este problema.

6. Uso de programas de lavado inadecuados

La selección incorrecta de programas de lavado puede someter al tambor a esfuerzos innecesarios. Por ejemplo:

  • Usar ciclos de centrifugado intensivos para prendas delicadas
  • Seleccionar temperaturas demasiado altas para ciertos tipos de telas

Sigue siempre las recomendaciones de lavado de cada prenda y utiliza los programas adecuados para cada tipo de tejido.

7. Falta de mantenimiento

La falta de un mantenimiento regular puede acelerar el deterioro del tambor. Algunas acciones preventivas importantes son:

  • Limpiar regularmente el filtro de la lavadora
  • Realizar ciclos de lavado en vacío con productos específicos para la limpieza de lavadoras
  • Revisar y limpiar las juntas de goma de la puerta

Un mantenimiento adecuado no solo prolonga la vida útil del tambor, sino también de toda la lavadora.

Conclusión

El tambor de la lavadora es una pieza crucial que requiere cuidados y atención para garantizar su durabilidad, dado que es uno de los repuestos más caros de la lavadora. Siguiendo estas recomendaciones y prestando atención a los signos de desgaste, podrás prevenir muchos de los problemas comunes que afectan al tambor de la lavadora. Recuerda que un tambor en buen estado no solo asegura un lavado eficiente, sino que también contribuye a la longevidad de tu electrodoméstico, ahorrándote dinero y molestias a largo plazo.

Si necesitas cualquier recambio para tu lavadora, busca la etiqueta donde viene el numero de serie y modelo y tecléalo en el buscador de Fersay. Te Mostraremos todas las piezas disponibles para tu electrodoméstico.

Consejos para evitar que las tuberías de tu caldera se congelen en invierno

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Cuando las temperaturas bajan y el frío se apodera de nuestros hogares, uno de nuestros mayores enemigos es la congelación de las tuberías de acceso a tu caldera. Este problema no solo puede interrumpir el suministro de agua caliente, sino que también puede causar daños costosos si no se toman medidas preventivas.

Hoy, te damos los mejores consejos para proteger los conductos de tu caldera y mantener tu hogar cálido y sin contratiempos.

¿Por qué se congelan las tuberías?

Las tuberías de la caldera suelen estar expuestas al frío cuando la caldera no está en el interior de tu casa o en un cobertizo. Especialmente en calderas y calentadores situadas en zonas exteriores o poco aisladas. 

Cuando el agua de las tuberías se congela, se expande, lo que puede generar fisuras o incluso roturas en los conductos. La congelación impide que el agua pueda correr hacía el circuito de la calefacción y agua caliente.  Este tipo de averías no solo es un dolor de cabeza, sino que puede dejarte sin calefacción junto cuando más la necesitas.

5 consejos para evitar que las tuberías de tu caldera se congelen

  1. Aísla las tuberías expuestas.

Utiliza materiales como espuma o cinta térmica para cubrir las tuberías externas o ubicadas en zonas sin calefacción, como garajes o sótanos. Este sencillo paso puede reducir drásticamente el riesgo de congelación.

  1. Mantén una temperatura constante en tu hogar.

Aunque no estés en casa, procura que la temperatura interior no baje de los 15ºC. Esto evitará que el frío afecte a las tuberías más vulnerables.

  1. Deja un grifo ligeramente abierto.

Cuando se avecinen noches muy frías con temperaturas extremas, abrir un grifo ligeramente (deja que el agua gotee) puede ayudar a aliviar la presión en las tuberías y evitar que se congelen al existir una corriente de agua. 

  1. Purgar la caldera regularmente. 

Realizar un mantenimiento adecuado de tu caldera. Purga los radiadores para evitar aire acumulado y mejorar la eficiencia de la caldera. Mantener la caldera a la presión correcta, entre 0,8 y 2,5 bares de presión, reduce la probabilidad de averías en invierno.

  1. Instala un termostato con función de protección contra heladas.

Algunos termostatos modernos tienen un modo anti-congelación que mantiene las tuberías en un rango de temperatura seguro, moviendo el agua del circuito, incluso en tu ausencia.

¿Qué hacer si ya tienes una tubería congelada?

Si notas que una tubería se ha congelado, sigue estos pasos:

  • Corta el suministro de agua para evitar posibles fugas.
  • Aplica calor de forma gradual con un secador de pelo o con paños calientes. Nunca uses fuego directo, ya que podrías dañar la tubería.
  • Si no consigues descongelar la cañería o detectas una rotura, llama a un profesional cuanto antes.

Prevenir siempre será más fácil  y más económico que reparar. Siguiendo estos consejos, podrás disfrutar del invierno sin preocupaciones y con la tranquilidad de que tu caldera y sus tuberías estarán a salvo del frío.

¿Tienes algún truco adicional para proteger las tuberías de las heladas? ¡Déjanos tu comentario! 😊 

AVERÍAS MÁS FRECUENTES EN CALDERAS Y CÓMO EVITARLAS

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Las calderas de gas y gasoil para calefacción y agua caliente son elementos fundamentales en nuestros hogares, especialmente durante el invierno. Al ser sistemas complejos, pueden presentar fallos con el paso del tiempo. Entender sus averías más comunes y cómo prevenirlas puede ahorrarnos más de un dolor de cabeza.

Problemas comunes en calderas de calefacción y agua caliente

  •  Problemas de presión. Es uno de los fallos más habituales. Si la presión de la caldera es demasiado baja, el agua no circula correctamente y puede que la calefacción no funcione. Si es demasiado alta, puede causar fugas.
    ¿Qué hacer? Revisa el manómetro de vez en cuando. Lo ideal es que marque entre 1 y 1.5 bares. Si notas que la presión baja o sube demasiado sin razón aparente, puede haber una fuga o un problema más serio; en ese caso, lo mejor es llamar a un técnico.
  • Radiadores con aire. Si tus radiadores están calientes por abajo pero fríos por arriba, lo más probable es que tengan aire acumulado en el circuito
    ¿Qué hacer? No te preocupes, la solución es fácil: purgar los radiadores. Solo necesitas una llave para abrir la válvula y dejar que salga aire hasta que comience a salir agua. Hazlo al menos una vez al año, preferiblemente antes de que llegue el frío y con la caldera caliente. 

  • Fugas de agua. Las fugas de agua de la caldera son una mala señal. Pueden ser provocadas por juntas o válvulas desgastadas, corrosión o piezas mal ajustadas. También puede que hayas encontrado gotas de agua por debajo de los ralladores, por un problema en la junta que los une al circuito.  Además de reducir la presión, pueden causar daños en paredes y suelos si no se arreglan a tiempo.
    ¿Qué hacer? Para prevenirlas, revisa de vez en cuando la zona donde está instalada la caldera y ralladores. Si ves humedad o agua, avisa a un técnico cuanto antes.
  •  Ruidos extraños. Golpes, silbidos, burbujeos o ruidos metálicos son señales de alerta. Pueden ser causados por aire en el sistema o problemas en la bomba de agua circuladora.
    ¿Qué hacer? Avisa al técnico. Un mantenimiento periódico ayudará a prevenir estos ruidos.
  • Fallos al encender la caldera. Si la caldera no enciende, revisa lo básico: ¿hay gas? ¿Está conectada a la corriente?¿Está abierta la toma de agua? Si todo parece en orden, puede ser un problema en el sistema de encendido, como electrodos sucios o sensores defectuosos.
    ¿Qué hacer? Para evitar sorpresas, realiza un mantenimiento regular.

  • Sobrecalentamiento. Si la caldera se apaga sola o notas que está más caliente de lo normal, puede estar sobrecalentándose. Esto suele ocurrir por una mala circulación del agua o porque el intercambiador de calor está sucio.
    ¿Qué hacer? La mejor manera de prevenirlo es mantener los quemadores de la caldera limpios y hacer revisiones periódicas.
  • El termostato no responde. ¿Subes la temperatura, pero no pasa nada? Puede que el termostato esté fallando. Esto es más común de lo que parece y puede deberse a problemas de calibración, batería baja o simplemente suciedad.
    ¿Qué hacer? Revisa si está limpio y bien colocado. Si aún así sigue sin funcionar, tal vez sea hora de reemplazarlo o consultar con un especialista.

Consejos básicos para evitar averías en tu caldera de gas

Aunque las calderas modernas son bastante fiables, un poco de cuidado preventivo nunca está de más. Aquí te dejamos algunos consejos prácticos para mantener tu caldera en buen estado y evitar contratiempos:

  •  Haz revisiones anuales: Un técnico puede detectar y solucionar problemas antes de que se presenten. Además, algunas garantías exigen este mantenimiento periódico.
  •  Mantén la caldera limpia: Evita que el polvo y los sedimentos se acumulen, ya que pueden afectar el rendimiento.
  • Buena ventilación: Asegúrate de que la caldera esté en un lugar ventilado para evitar la acumulación de gases.
  • Presta atención a las señales: Si notas algo raro, como ruidos, fugas o un funcionamiento inusual, no lo ignores. Actuar a tiempo siempre es mejor.

Con estos consejos, tu caldera no solo funcionará mejor, sino que también te durará más tiempo. 😊

Guía para cambiar la bombilla del microondas

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El microondas se ha convertido en un electrodoméstico indispensable en nuestros hogares. Es uno de los aparatos de cocina que mas usamos al cabo del día y se han ido adaptando a las nuevas necesidades de los usuarios. Ahora podemos encontrar microondas de convección, con grill, empotrables…un sinfín de opciones que hacen nuestra vida más sencilla en el día a día.

Uno de los accesorios que podemos cambiar fácilmente en estos aparatos, son las bombillas. Suelen tener una vida útil de 1.000 a 3.000 horas de uso, dependiendo de las marcas y modelos de microondas.  Es normal qué pasado este tiempo, haya que sustituirlas por una nueva.

Pasos a seguir para cambiar la bombilla del microondas

El proceso de cambio para una bombilla de microondas es sencillo y el recambio es bastante asequible. Es importante, siempre que se manipule un microondas quitarle los objetos metálicos de las manos: relojes, anillos, etc.

  1. Desenchufar el microondas de la red eléctrica.
  2. Aflojar los tornillos de la parte delantera y trasera del microondas. Dependiendo del modelo puede ser una carcasa entera con tornillos en ambos lados.
  3. Retirar la carcasa que cubre la parte trasera del microondas.
  4. Descargar el condensador con un destornillador con el mango protegido con plástico. Haciendo un puente entre los dos diodos del condensador. Suele saltar una chispa. En ese momento puedes manipular la conexión de la bombilla.
  5. Normalmente la bombilla se encuentra en la parte frontal superior del microondas, la sacamos hacia afuera con unos alicantes y desenganchamos los contactos.
  6. Retiramos la bombilla fundida y reemplazamos por la nueva
  7. Volvemos a poner los contactos y la carcasa. Asegurarse que los agarres laterales están bien puestos.
  8. Volver a atornillar las piezas que faltan…¡¡¡ y listo!!

En www.fersay.com podéis encontrar fácilmente la bombilla de microondas que necesitáis de diferentes marcas o cualquier recambio para vuestro microondas o electrodomésticos.

Símbolos de lavado: Guía práctica de iconos de tu lavadora

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Símbolos de lavado y tejido de una lavadora

Cuando nos enfrentamos a las tareas del hogar, uno de los electrodomésticos más esenciales es la lavadora. Sin embargo, no siempre entendemos los símbolos que aparecen en su panel de control. Estos íconos son clave para optimizar el lavado de nuestras prendas y prolongar su vida útil. En este artículo, te explicaremos el significado de los símbolos más comunes de lavado y cómo utilizarlos correctamente. ¡Conviértete en un experto y saca el máximo provecho a tu lavadora!

¿Qué significan los símbolos de lavado en una lavadora?

Los símbolos de las lavadoras representan diferentes programas de lavado diseñados para adaptarse a tipos específicos de tejidos y niveles de suciedad. Aunque pueden variar según la marca y modelo, la mayoría tiene un conjunto estándar de dibujos. Conocerlos es fundamental para evitar errores como encoger tu suéter favorito o dañar prendas delicadas.

Algunos de los íconos más comunes incluyen:

  • Una tina con agua: Representa el lavado general. Puede acompañarse de números que indican la temperatura adecuada (por ejemplo, 30°, 40°, 60°).
  • Una espiral o torbellino: Este símbolo indica el ciclo de centrifugado.
  • Una mano sobre la tina: Señala un lavado a mano o delicado. Ideal para tejidos sensibles como la seda o lana.
  • Una cruz sobre la tina o espiral: Significa que no debe haber lavado o centrifugado.

Asegúrate de consultar el manual de tu lavadora para interpretar correctamente estos símbolos en el contexto de tu modelo.

Tipos de programas de lavado según el tejido

Cada prenda tiene necesidades específicas, y los programas de las lavadoras están diseñados para cubrirlas. Aquí tienes un desglose de los programas más comunes:

1. Algodón

Este es uno de los programas más utilizados. Representado generalmente por una camiseta o una flor de algodón, está diseñado para ropa de uso diario como camisetas, toallas y sábanas. Se adapta bien a temperaturas altas, aunque puedes ajustarlo a 30° o 40° para cuidar colores y tejidos más delicados.

2. Sintéticos

Simbolizado por un triángulo o fibras entrelazadas, este programa es ideal para prendas hechas de poliéster, nailon o mezclas sintéticas. Utiliza temperaturas más bajas y ciclos más cortos para evitar deformaciones.

3. Delicados

El símbolo de una flor o una mano indica este programa, pensado para tejidos frágiles como seda, encajes o ropa interior. El ciclo es más suave, con menos agitación y temperaturas bajas.

4. Lana

Con un dibujo de una oveja o un ovillo de lana, este programa es esencial para cuidar prendas de lana, evitando que se encojan o pierdan su forma. Usa agua fría o tibia y un ciclo de centrifugado reducido.

Cómo interpretar los símbolos adicionales de las lavadoras

Además de los programas básicos, las lavadoras modernas ofrecen funcionalidades avanzadas que también se representan mediante símbolos. Aquí tienes algunos ejemplos:

1. Prelavado

Representado por una tina con líneas verticales, este ciclo es útil para ropa muy sucia, ya que añade un paso adicional de remojo antes del lavado principal.

2. Enjuague extra

Un ícono con varias gotas de agua indica que se añadirá un ciclo adicional de enjuague. Esto es ideal si tienes piel sensible o usas mucho detergente.

3. Secado

En las lavadoras-secadoras, un símbolo de un sol o una nube con líneas onduladas indica la función de secado. Recuerda separar las prendas según su resistencia al calor antes de usar esta función.

4. Eco o ahorro de energía

Generalmente ilustrado con una hoja o un símbolo de ahorro, este programa está diseñado para reducir el consumo de energía y agua. Aunque dura más tiempo, es ideal para cargas ligeras y el cuidado del medio ambiente.

Consejos finales para entender los símbolos de tu lavadora

  1. Lee las etiquetas de tus prendas: Antes de seleccionar un programa, revisa las instrucciones de lavado de la ropa. Estas etiquetas tienen símbolos que corresponden con los programas de la lavadora.
  2. Usa detergente adecuado: Algunos programas, como los de ropa delicada o lana, requieren detergentes específicos para proteger los tejidos.
  3. Evita sobrecargar la lavadora: Respetar la capacidad máxima de tu lavadora no solo protege la máquina, sino también tus prendas.
  4. Realiza mantenimiento periódico: Limpia el filtro y realiza ciclos de mantenimiento para garantizar que los programas funcionen correctamente.

Conocer el significado de los símbolos en el panel de tu lavadora no solo facilita las tareas del hogar, sino que también cuida tus prendas y prolonga la vida útil del electrodoméstico. Si estás buscando repuestos o accesorios para tu lavadora, en Fersay encontrarás toda la información que necesitas.

Como colocar los alimentos en el frigorífico

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Organizar la nevera y saber colocar los alimentos es fundamental para conservar bien los alimentos y para gastar menos electricidad. 

A parte de saber colocar bien los alimentos, hay que seguir estos 5 consejos:

  • No llenarlo demasiado.
  • Separar los alimentos crudos de los cocinados para evitar contaminación cruzada.
  • Comprobar que la Temperatura está en 4-5º.
  • Cambiar cada 6 meses el filtro del agua si lo lleva.
  • Limpiar y mantener limpias todas las superficies del electrodoméstico.

¿Cómo colocar los alimentos en la nevera?

ESTANTE SUPERIOR: Aquí han de colocarse los alimentos que no necesiten mucho fío como embutidos, conservas, pastas frescas, pasteles…etc


ESTANTES MEDIOS: Yogures, quesos, huevos, sobras de comida…etc


ESTANTE DE ABAJO: Aquí han de colocarse los alimentos que necesiten mas fío como carnes y pescados o alimentos perecederos.


CAJONES: Usar para las hortalizas, frutas y verduras


BOTELLEROS Y PUERTAS LATERALES: Usar para mantequilla, mermeladas, salsas y bebidas que no se consuman muy muy frías. Por ejemplo la cerveza o bebidas que necesiten mas frío, meter en las baldas de abajo.

Recuerda que mantener tus electrodomésticos en forma ayuda a alargar la vida de los mismos y a tener una calidad de vida mas sana. Cualquier recambio o accesorio que necesites cambiar puedes encontrarlo en Fersay.

Cómo limpiar la cal de una plancha a vapor

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Limpieza de cal en planchas a vapor

La plancha es uno de los pocos electrodomésticos que usamos con mucha frecuencia y le hacemos poco mantenimiento, lo cual provoca que muchas veces comience a expulsar agua sucia con cal, provocando que la ropa se manche.

Para que la limpieza de tu plancha de vapor quede perfecta, pon agua y vinagre a partes iguales en el depósito y una vez que la plancha esté muy caliente, utiliza la función de vapor hasta que se vacíe el depósito sobre un trapo usado.

Una vez que el depósito está limpio, déjala enfriar y haz una pasta con dos cucharadas de bicarbonato de sodio y una cucharada de agua. Forma una mezcla densa y untalo en la suela de la plancha. Déjalo durante unos minutos y retíralo con un trapo húmedo. Puedes usar un bastoncillo si se ha quedado algún resto en algún agujerito de la suela.

Limpiar la cal en un centro de planchado 

Cada marca tiene unos consejos diferentes para su centro de planchado que es conveniente seguir. Lo normal es que cada centro de planchado lleve la función de descalcificación y te lo pida cuando esté sucia. 

Es sencillo y solo requiere seguir las instrucciones de la marca. Suelen tener un  botón de descalcificador y esperar a que pite, cuando ya haya pitado la plancha está lista para soltar toda la cal. Usa un trapo viejo y expulsa todo el vapor sobre él.

En algunos centros de planchado, la limpieza consiste en enjuagar el depósito con agua. Para esta función, los depósitos cuentan con un tapón enroscado en la parte inferior del aparato. Después de vaciarlo, deberás llenarlo con agua fría, y volver a vaciarlo, hasta que el agua salga completamente limpia.

En los centros de planchado es bueno usar algún descalcificador con frecuencia y cambiar el cartucho antical para que la plancha funcione correctamente. 

Mas información en www.fersay.com

CÓMO LIMPIAR EL CAJÓN DEL DETERGENTE DE TU LAVADORA

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Limpiar el cajón de detergente de una lavadora es importante para mantener la lavadora en buenas condiciones y prevenir problemas de mal lavado de la ropa. Te contamos cómo puedes limpiarlo:

1. Retira el cajón de detergente: En la mayoría de las lavadoras, el cajón de detergente es extraíble. Sácalo tirando suavemente hacia afuera, la mayoría de las lavadoras llevan una pestaña para poder extraerlo y otras, basta con levantarlo tirando de la parte de atrás hacia arriba. Asegúrate de hacer esto con la lavadora apagada.

2. Por lo general, el cajón consta de varias partes, como el compartimento para el detergente, el suavizante y posiblemente otros. Desmonta estas partes si es posible y ponlo en un cubo con agua caliente y vinagre y déjalo durante 15 minutos

3. Elimina residuos y moho: Revisa el cajón y las partes desmontadas en busca de residuos de detergente endurecido o moho. Utiliza un cepillo de dientes viejo o un cepillo pequeño para fregar y eliminar cualquier residuo pegado.

4. Limpia con bicarbonato y un trapo húmedo: Aprovecha el cepillo de dientes para frotar la goma de escotilla con un poco de bicarbonato de sodio y luego pasa un paño húmedo con vinagre de manera delicada.

5. Seca completamente: Una vez limpio, seca todas las partes con un paño limpio y déjalas secar al aire antes de volver a colocar el cajón en la lavadora

6. Vuelve a montar el cajón: Una vez que todas las partes estén completamente secas, vuelve a ensamblar el cajón y deslízalo de nuevo en su lugar en la lavadora.

Es recomendable limpiar el cajón de detergente al menos una vez al mes para mantenerlo libre de residuos y prevenir problemas de malos olores o problemas de lavado.

Descalcifica la salida del detergente, si es necesario

Inserta el cajetín de nuevo en la lavadora e introduce descalcificador en el cajón del detergente. Pon un ciclo de lavado con agua caliente y la lavadora vacía. Dependiendo de la dureza del agua de tu localidad, el proceso de descalificación es importante hacerlo cada 6 meses.

Con estos sencillos pasos vas a ver como tu lavadora no solo vuelve a brillar, si no que su rendimiento es mejor. No olvides poner de vez en cuando algún ciclo de agua caliente para desatascar las tuberías y que se limpien mejor.

Más información en www.fersay.com

Guía de Soluciones: ¿Por qué tu lavadora deja la ropa excesivamente húmeda? 6 causas posibles

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lavadora

A todos nos ha pasado alguna vez que vas a sacar la ropa de la lavadora y notas que sale muy mojada. Normalmente con ponerle otro ciclo de centrifugado adicional lo puedes solucionar, aunque es sintomático de algún problema.  

En este post, te vamos a contar las principales razones por las cuales, tu ropa sale demasiado mojada. ¿Por qué no centrifuga bien la lavadora y cómo solucionarlo?

Media docena de motivos que pueden afectar al centrifugado de la ropa de tu lavadora

  1. Filtro obstruido: Las lavadoras tienen un filtro que puede obstruirse con pelusas, cabellos u otros objetos. Si no puede desaguar el exceso de agua puede afectar al rendimiento del centrifugado. Si el filtro está sucio o atascado, abre la compuerta donde está alojado que suele ser en el pie de la lavadora y límpialo con agua tibia y vinagre.
  2. El sensor de humedad: Es un pequeño filtro compuesto por dos tiras de acero inoxidable que tiene como función medir la humedad de nuestra colada y ajustar la duración del ciclo de secado. Este sensor se puede limpiar con un trapito húmedo, aunque es menos probable que se obstruya.
  3. Problemas con la bomba de agua: Si la bomba de agua de la lavadora no está funcionando correctamente, puede afectar la capacidad de la máquina para drenar adecuadamente el agua antes del centrifugado.
  4. Sensor de carga descompensada: Algunas lavadoras modernas cuentan con sensores que detectan el equilibrio de la carga. Si estos sensores fallan, la lavadora podría tener dificultades para equilibrar la carga correctamente durante el centrifugado
  5. Correa de transmisión rota o desgastada: La correa de transmisión es la encargada de conectar el motor con el tambor de la lavadora. Si está rota o desgastada, puede impedir que la lavadora gire a la velocidad necesaria.
  6. Si después de descartar los anteriores problemas, la lavadora no centrifuga bien, puede que tengas que ponerte en contacto con un profesional, porque puede ser que el condensador esté deteriorado, o que haya que cambiar el tubo de desagüe al estar atascado y la lavadora no pueda desechar bien el agua.

Cuidar de tus electrodomésticos, es una forma fácil y sencilla de alargar la vida de tus aparatos del hogar, a la vez que ahorras y ayudas al medio ambiente no desechando aparatos que aún pueden funcionar. Más información en www.fersay.com